Por Felipe Sepúlveda Martínez - This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.
Sentir nuestra cotidianidad como propia, como natural, como parte de nuestra identidad cultural y medio ambiental, es tan solo un sueño. Un sueño que nos plantea la posibilidad de exigirnos y forjar día a día nuestras esperanzas.
Hemos pasado el año del cambio según muchas voces en el mundo. La alineación de los planetas señalada por los Mayas fue parte de este designio. Seguramente muchos lo han vivido, efectivamente hemos visto cambios. Se han caído edificios por si solos, nadie responde ante las próximas voces sepultadas. La temperatura ha bajado considerablemente en algunos países, las personas mueren sin ni siquiera recibir un abrazo para recibir calor. El calor en ciudades como Bogotá ha generado una nueva postura y vivencia de la ciudad, andamos en chanclas mientras temperaturas bajas condicionan las cosechas en la Guajira, nuestros niños mueren por desnutrición. Cambios en los rostros de quienes desean gobernar este país, jóvenes con sonrisas altivas y llenos de vigor consumado por partidos tradicionales que vienen preparando ese cambio, los relevos que llaman. Soy positivista en el cambio, en la miseria que persiste. [VER Youtubeando: ¡Que vivan nuestras realidades invisibles!]
Nuestra miseria no es más que el resultado de nuestras propias acciones y decisiones. De esta manera es increíble ver y oír a Leonardo di Caprio, recientemente nominado al Oscar por su actuación en una película grandilocuente (The Wolf of Wall Street) y creo yo, que verídica del exceso de aquellos que manipulan nuestras economías y que como icono de la cultura del entretenimiento banalizado, haga parte de un documental que nos hace el repasito de nuestra condición medio ambiental, haciendo un llamado a nuestra posición ética. Di Caprio participa y produce LA ULTIMA HORA (11th Hour) dirigida por Leila Conners Petersen y Nadia Conners.
Documental del 2007 de gran resonancia por su alta calidad y participantes como Mikhail Gorbachev, el científico Stephen Hawking, la Premio Nobel de la Paz Wangari Maathai, el ambientalista David Suzuki entre otros, en esta radiografía de la humanidad. Repaso a través de la miseria y más miseria que ha provocado el caos medio ambiental. Basura, desastres naturales, experimentos genéticos, etc. abominaciones de organizaciones y personas que en nombre de la humanidad, nos han deshumanizado. Políticos haciendo de las suyas validando a través de leyes esta deshumanización, hechos que siguen repitiéndose día a día sin ninguna acción perentoria. Este documental nos permite tener una inmersión en realidades lejanas pero tan cercanas, las imágenes contundentes y devastadoras, a veces desesperanzadoras. Vale la pena llorar por la dignidad perdida, por la dignidad que seguimos perdiendo, salir a la calle a sembrar, a abrazarnos, a tratarnos como humanos, a soñar y vivir el mundo que queremos, no el que nos hacen vivir. Salir a hacer respetar la naturaleza desde nuestra humanidad, desde nuestro amor… limpiar, asear y sanear de todo ámbito la maleza que deshumaniza, hacer vivible el sueño eterno del AMOR, que en definitiva, para estos grandes pensadores y activistas es el fin y principio de todo. Amar, amar y amar hasta que esto se restablezca, amar con responsabilidad y ética, amar hasta el punto de hacernos respetar, porque no hay amor cuando en nombre del amor nos violan, nos niegan, nos sesgan, nos quitan el alimento, nos quitan nuestra identidad, nos manipulan hasta la muerte, nos toman de títeres para su divertimento… nuestros hijos siguen muriendo de hambre.
Hay esperanza aun, amar es la opción… de qué forma es la cuestión.
Palabras Clave: Activismo, Medio Ambiente, Desastres Naturales, Amor, Esperanza.