Conocer países en plan mochilero, ha sido una idea que ha calado en muchos jóvenes en los últimos quince años. En mi caso personal recorrer Sudamérica a bajo costo se convirtió en un proyecto que tenía que realizar en algún momento de mi existencia y que volvería a repetirlo.
En el segundo semestre del 2010 me encontraba en Valparaíso – Chile realizando la práctica profesional de mi carrera, durante mi estadía en el país austral y con algunos ahorros decidí planear mi travesía por Perú, Bolivia y el norte chileno para comienzos del 2011 con los consejos de varios amigos que ya habían realizado esta ruta.
Mi primera parada tras veintiséis horas en bus desde Santiago a Arica (la ciudad fronteriza entre Chile y Perú) me encontré con Alejandro, un amigo español con el que había vivido en Valpo y quien sería mi compañero de viaje hasta Arequipa. Para cruzar la frontera se puede llegar por taxi o bus, yo recomiendo el primero porque es rápido y no es tan caro, ya en terminal de Tacna – Perú decidir cuál empresa usar depende de cuánto dinero se quiere destinar puesto que el precio entre una empresa como Cruz del Sur (la más gomela) y Angelitos Negros varia significativamente.
Arequipa: Se puede recorrer el casco histórico, por lo general los hostales están ubicados muy cerca, otro plan es tomar un taxi y pedirle el favor al conductor que les dé una “vuelta” por una parte de la ciudad como las terrazas y monumentos.
Visitar el Cañón del Colca (uno de los más profundos del mundo): Es una buena opción para los que les gustan las largas caminatas y tengan algo de estado físico ya que la presión atmosférica del lugar afecta bastante. Existen varios planes, uno de ellos es el de descender una parte del cañón para llegar a un oasis y madrugar al siguiente día para iniciar el ascenso; en caso de no aguantar, se puede alquilar un burrito para que lo ayude a salir. También se puede visitar Cabanaconde un pueblo cercano al mirador la cruz del cóndor donde supuestamente se escuchan y se ven volar estas aves en el cañón.
Cusco: En bus son aproximadamente ocho horas desde Arequipa, en esta ciudad además de conocer su centro histórico se debe pagar la entrada a Machu Picchu, hay posibilidad de descuentos con la tarjeta de estudiante internacional. También se puede dar una vuelta por la piedra de los doce ángulos, la gran pared donde se “ve” un jaguar y recorrer unas ruinas incas en Ollantaytambo.
Para llegar a Machu Picchu existen varias opciones, una de ellas es tomar los trenes (carísimos) o la otra es hacer la ruta de la hidroeléctrica de Santa Teresa que fue la que hice. Lo que recomiendo si se toma la última opción es pagar un asiento en un transfer ida y vuelta (una Van que por lo general en la oficina de los tiquetes del tren ofrecen este servicio a un buen precio) que lo transporte hasta la hidroeléctrica de una manera más rápida y emocionante de llegar a este misterioso lugar. Al llegar a ese sitio uno sube un pedazo de montaña y sale a la ruta del tren donde uno sigue los rieles y camina a treinta o cuarenta y cinco minutos -dependiendo el ritmo- hasta Aguascalientes, allí uno puede pasar la noche en camping, en hotel u hostal.
El paso a seguir, es tomar un bus desde Aguascalientes hasta la entrada de Machu Picchu o subir caminando. Ya adentro de este espacio uno puede pasar más horas caminándolo, descifrando la perfección, subiendo al Wayna Picchu, meditando, etc.
Puno: Este fue mi último destino en este país en donde se encuentra la parte peruana del lago Titicaca. Lastimosamente no tuve el tiempo para recorrerla pero vale la pena visitar la isla Taquile y otras islas flotantes en la zona.
Copacabana: Es la ciudad fronteriza entre Perú y Bolivia, desde ahí salen buses para la Paz o lanchas en el Titicaca para recorrer las islas. En este punto hay que tener en cuenta que dependiendo de la zona y la isla a la que uno desee ir el precio cambia al igual que los números de trayectos. Yo fui a la parte norte de la isla del Sol donde hay una pequeña playa y unas ruinas, honestamente no hay mucho que ver ahí y conseguir un lugar presentable para pasar la noche es complicado, razón por la que la mayoría de visitantes usan carpas. Al observar el atardecer hablé con unos chilenos que viajaban en la misma lancha y de aquel grupo de conversación se unieron unos colombianos y mexicanos que salvaron la noche al frente del lago que está a mayor altura en el mundo.
La Paz: El mito de la altura de esta capital se siente a partir de los cinco minutos de caminada, por lo general los hostales quedan cerca del mercado de las brujas, lugar conocido por vender los elementos para practicar hechicería como por ejemplo, velones, fetos de llamas, bebidas, etc. Los lugares para conocer son: la Plaza Murillo, la estatua del “che” Guevara, el mercado Camacho y las excavaciones de Tiwanaku. Otro plan nombrado es el de la carretera de la muerte que consiste en descender en bicicleta dicho trayecto conocido por su dosis de peligrosidad.
Potosí: Ciudad conocida por sus construcciones coloniales y sus minas, visitar una de estas hace parte de una “acción social” del turismo al mostrar al visitante el arduo trabajo de los mineros que en la mayoría de los casos utilizan técnicas de la colonia para su labor. Yo me apunté al plan que comienza con la parada en pueblo minero, en el que se compran algunos regalos para los mineros (cigarrillos, gaseosa, hojas de coca y alcohol puro), luego se entra a la mina y se recorren varios espacios con diferentes temperaturas; llama la atención la creación de altares dedicados al tío, es decir, el diablo, ya que la creencia popular habla sobre los poderes de este personaje inventado por los colonos como una estrategia de terror para que los indígenas trabajaran, a su vez se le acreditan poderes para encontrar riqueza dentro de la mina y la facultad de entrar y salir vivos de ahí.
Uyuni: Si ir a Machu Picchu es una experiencia a otro nivel, el salar de Uyuni representa la majestuosidad de la naturaleza repartida en varios paisajes. Por lo general los recorridos son de tres días e incluyen comida y hospedaje. El primer día se conoce el cementerio de trenes, el proceso de la extracción de la sal en el salar de Colchani y los hexágonos que se forman en la superficie salada, en mi caso llovió pero sirvió para observar como se refleja el cielo en los charcos generando la sensación de unidad; hay que tener en cuenta que para recorrer estas parte del salar junto a la isla del pescado depende del clima. El segundo día se recorren las cuatro de cinco lagunas (Cañapa, Hedionda, Honda y Ramadita) donde conviven colores, flamingos, camélidos y otras especies, el árbol de piedra y otras formaciones ígneas y el desierto de Dalí. Para el tercer día se madruga para ver los geisers en plena actividad seguido en un baño en termales y una parada en la laguna verde.
El final de mi travesía empieza en la frontera de Chile con Bolivia donde está ubicado un bus abandonado muy parecido al de la película into the wild. La última parada del tour termina en San Pedro de Atacama donde tomo un bus para Calama y de ahí viajar veinte horas hasta llegar a Santiago.
Presupuesto: $700 dólares, saliendo desde Chile, comiendo y durmiendo bien por 25 días.
TIPS:
* Ir programado y preparada para un plan con pocos lujos que incluyen choques, disgustos y alegrías.
* Ir a las plazas de mercado para comer es una económica y buena opción para conocer la gastronomía local, hablar con la gente y quedar satisfecho.
* Viajar en la última ruta de bus los trayectos largos para ahorrarse el costo de una noche de hostal y llegar de día al lugar.
* Si se viaja solo, tratar de hacerse amigos en el viaje para disminuir costos, compartir las esperas en los terminales, los silencios en los buses, intercambiar experiencias, armar fiestas, y planes. Inicialmente viajé sola pero en el camino me encontré con amigos y conocí más personas con las que he creado una red de cooperación en caso de viajar a sus países.
* Estar alerta en cada lugar, ya que es fácil reconocer a un mochilero o extranjero lo que hace llamativo al ladrón.
* Evitar comprar tours en las calles, en la mayoría de los casos son una estafa o una manera insegura de llegar a los lugares.
* Para comprar regalos, nuevamente las plazas de mercado tienen una sección dedicada a la venta de ropa y accesorios con la posibilidad de negociar el precio final.
* Antes de llegar a Machu Picchu es mejor concretar una reserva en un hostal desde Cusco, ya que los precios por noche son altos en Aguascalientes.
* Tratar de pasar las fronteras con alguien, por lo general a los latinoamericanos y especial a los colombianos tratan de “montársela” con el tema de la droga y no falta el policía que quiera sacarle alguna “propinita” para dejarlo pasar.
* Evitar tomarle fotos a alguien sin su permiso porque puede cobrar propina o sentirse ofendido y molesto.
* Abrir la mente y dejarse llevar por lo que se está viviendo.
Pdt: Cualquier duda o detalle de este relato no dude contactarme.
Por Nathy Gómez @nathygomezz