Frankie Dante, eterno sonero de la primera línea de la salsa

Por El Zudaca, nómada urbano – @Sursystem

Afiche cortesía de Salsa Sin Miseria – @salsasinmiseria

La Salsa en Nueva York, la gran manzana de la diáspora afrolatinocaribeña

La cultura popular salsera está repleta de héroes, leyendas urbanas, himnos y mitologías rítmicas.  Danzantes rumbean hasta el infinito, espíritus melómanos documentan en cada audición la historia cultural de la salsa, contando la vida de ilustres personajes como Frankie Dante, el humanista de la divina melodía nacido en Santo Domingo- República Dominicana, que hizo de Nueva York una barricada rebelde frente a las permanentes injusticias de la gran manzana, durante la convulsionada época de los años 60s y 70s.

Desde sus orígenes en el Barrio Latino de Nueva York y en las diferentes barriadas de la constelación de islas del caribe, la salsa ha estado vinculada no sólo con las adversidades de la pobreza, sino con la experiencia colectiva vivida en sus calles, parques, playas y otras áreas públicas, por parte de sectores populares de negros, mulatos, mestizos, indios taínos, etc.  que conforman la diáspora de inmigrantes en las calles de la gringa Babylon. En palabras del antropólogo e investigador Alejandro Ulloa: “La salsa antes de vestirse de frac para ingresar a clubes y salones de baile, rodó por los suburbios con un pregón en la voz y un ritmo en el corazón. La callejería musical, con sus oralidades y relatos, explicaría las permanentes alusiones al barrio popular, sus personajes, su perfil étnico y social, la violencia sufrida y ejercida, los alardes machistas, la fiesta en el andén y las verbenas, los placeres del cuerpo y los conflictos visibles en la ciudad, temas presentes en la salsa “dura” desde sus comienzos hasta la actualidad.  Así lo testimonian diversas composiciones a través de una mirada que no sólo registra los hechos, sino que toma distancia frente a ellos, ilustran de manera singular la densidad social en que transcurre la vida cotidiana de los sectores subalternos y las circunstancias asociadas con la vecindad en el espacio urbano”

Frankie Dante y la Flamboyan

Frankie Dante era uno de esos callejeros que nunca negoció su esencia de semilla de caña brava, el artista subversivo del sello Cotique que vivió con intensidad, el genio de la mirada extraviada, el candidato del lumpen, el socialista que nos impregnó de ciencia revolucionaria bailable, el justiciero de todos los carelocos y las carelocas del ghetto, el cantante que ninguneaban por su voz nasal, pero tan auténtica por expresar la poética de un pregonero,  un loco cuerdo que nunca traicionó a su pueblo, y se enfrentó al monopolio de Jerry Masucci con la mafia all stars, perdón la Fania all Stars. Sad but true. Franky, un man bien parao en la raya, que quisieron crucificar por ser el líder de una pandilla sonora llamada Orquesta Flamboyan, cuyo rojo pentagrama extasiaba de furia festiva el Bronx Newyorrican, el Spanish Harlem, etc. Cizas, Franky un vagabundo de la gran metrópoli, un hijo auténtico del son montuno ja ja ja las carcajadas tiernas sobre el asfalto. Un caudillo de nuestra furia festiva. Un satélite antillano orbitando con desmesura por la galaxia neoyorquina pidiendo que acabara la guerra del Vietnam.

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Vos, queridísimo Frankie Dante, flaco aletoso sigues siendo nuestro presidente, el cantante que hizo lo que quiso con la melodía, devolver a la salsa a la esquina donde ella hizo el amor con el piano tocado por las manos prodigiosas del negro malungo Markolino Dimmond, el Jimi Hendrix de la salsa. Oh Franky, el panasónico que lanzaba a la calle sus canciones, a la calle donde conoció amigos, vecinos, coquetonas de media noche y mulatas cósmicas. Franky siempre gustaba de llevar la salsa al parque, donde ella, se vuelve movimiento y rescata su fuerza cuando la memoria musical nos libera de todos aquellos dolores para hacer una fiesta de alegre rebeldía con la guitarra de Harry Viggiano, las negras y blancas del judío de Jerusalén, Larry Harlow, las voces de Chivirico Dávila y demás vaguemios de la corte que lo secundaba en sus experimentos sonoros.

Seguir escuchando a Franky y los trombones de la Flamboyán en las calles de Cali, significa insistir y pelear porque la salsa sea y continúe siendo un sentimiento popular que rebasa cualquier monopolio de las emisoras, las disqueras, los sabiondos y las modas musicales que pretenden hacer creer que todo tiene su final. La Salsa en Cali sigue siendo ese lenguaje mestizo que cuenta las historias de los rostros prietos, matices mulatos y colores indígenas de las barriadas sin maquillaje, repletas de poesía y resistencia cultural. Aquí seguimos bailando el guaguancó, en las barricadas de la imaginación, fantasía y libertad que nos inspira la sinceridad de tu obra artística Frankie Dante.

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Aquí cantamos con fervor de rumberos tu cancionero en Puerto Resistencia, Univalle, La Caldera del Diablo, Mala Maña, el barrio obrero, en el encuentro de melómanos de la feria de Cali. Aquí pegamos afiches con tu rostro en la calle del pecado para saborear ráfagas de salsa sin miseria. En la Calicalentura, tus canciones no envejecen porque se atreven aún con lucidez y valentía, a enfrentar la terrorista coherencia discursiva de las ideas y las acciones, en tiempos fagocitantes de estrellas pop financiadas por los Iluminatis, políticos corruptos que negocian nuestras vidas, invadidas por la publicidad, las redes sociales y el apocalipsis inminente del calentamiento global.

La melodía de Frankie Dante sigue deambulando por las calles ricas de la opulencia del norte y por las calles pobres del sur global. Conectando dos mundos, gracias a la música, la poesía y los ritmos de un continente que adora conocer las historias que ocurren en las entrañas del barrio, afrontar los peligros del consumismo en el capitalismo depredador, y multiplicar los mantras de esperanza de la diversidad cultural de nuestra América. ¡Venceremos!

MUSIC MACHINE es un medio alternativo creado en 2008 con el objetivo de difundir el trabajo de los músicos colombianos así como la música colombiana independiente.

PREMIOS Y RECONOCIMIENTOS:

2021; Ganadores de la Beca Es Cultura Local – Fontibón del Instituto Distrital de las Artes, IDARTES, con el proyecto Music Machine Sesiones #MMSesiones: https://musicmachine.com.co/website_5747d94c/music-machine-gana-beca-cultura-local/

2019; Ganadores de la BECA DE PARTICIPACIÓN EN MERCADOS DE LAS INDUSTRIAS CULTURALES Y CREATIVAS del Programa Distrital de Estímulos Instituto Distrital de las Artes – IDARTES con la cual participamos en dos mercados: Quinta edición de la Expo Iberoamericana de la Música EXIB que se realizó en Setúbal, Portugal del 13 al 15 de Junio, y el M.A.P.A.S. que se realizó en Tenerife, España del 10 al 14 de Julio más info en:   https://musicmachine.com.co/mapas2019/